Michelle || ID

→ NOMBRE COMPLETO: Michelle Engel Knight
→ EDAD: 23 años [Desconocido]
→ SEXO: Masculino
→ ORIENTACIÓN SEXUAL: Homosexual.
→ RAZA: Híbrido [Incubo - Vampiro]
→ GRUPO DE PERSONAJE: Kavaglier
→ NACIONALIDAD: Inglesa
→ DISTRITO: Euphium


Tu personalidad, en ocasiones, es difícil de describir. Porque sabes llevar a cada persona a donde más te interesa, y pocos se dan cuenta de que, posiblemente, tramas algo. Te caracterizas por ser sincero, es cierto pero también sabes que eres un adicto a los rumores y a los chismes. Te encanta obtener información acerca de todo porque sabes que la información es poder y qué mejor que esté en tus manos…Cuando te sientes acorralado por alguien sólo tienes que explicarle que sabes demasiado de él, quizás hasta el punto de poder amargarle la vida y si, sonríes cuando el otro empieza a retroceder en sus actos. Tienes una mente calculadora e inestable y, eso, unido a tu astucia, hace que ningún plan se te resista. En un momento de rabia o en algún enfrentamiento con alguien, las primeras palabras que salen de tu boca son acusaciones o inventos. Eres capaz de ser muy venenoso e hiriente aunque lo mejor de ti, para fortuna de otros, es que se te pasa en cinco minutos debido a que tu mente se ha distraído con algo. Prefieres quedar en paz con alguien que guardar rencor y estar enfadado. No sueles estar satisfecho con lo que tienes, tienes que estar entretenido todo el tiempo porque tu mente se nubla pensando que otros se lo pueden estar pasando mucho mejor que tú o que tienen grandes planes y no estás en la lista de invitados.
Te niegas a crecer, algo muy típico de ti. Vives en una constante etapa de adolescencia y eso, obviamente, también recae en las decisiones que tomas. La madurez, responsabilidad de tus actos y bla bla bla no van contigo. Eres inestable, inconstante, inmaduro e incorregible, si, además de bastante irresponsable pero tienes gracia, y eso gusta a los demás. En el fondo sabes que sin ti, las fiestas no tienen sentido, que los viajes son aburridos y que pones la chispa a cualquier evento.
Estás en constante búsqueda de ti mismo, no eres conformista y siempre quieres hacer más y más pero te ahogas a menudo y todo tu mundo se desploma en un momento, aunque te recuperas pronto.
Puedes llegar a ser muy frío y reservado con la familia, y a veces la arrogancia te sale por cada uno de los poros de tu piel. Con los amigos sueles ser una persona noble y amable, entre ellos sabes que eres el admirado y sí, todo hay que decirlo, el superior.
Pero en el fondo sólo eres un inseguro ¿no es así? Tienes miedo, mucho miedo. Principalmente si alguien dice quererte, probarás a prueba su cariño. También puedes mostrarte inseguro y te aferras demasiado a ese sentimiento que puede llegar a aparecer. Después de todo... eres un ser sacrificado desde la cuna.



¿Qué sucede cuando uno de los gemelos muere? ¿Lo han pensado? Se dice que los que han nacido juntos tienen un vínculo inquebrantable, mucho más fuerte que aquel hilo rojo del destino que tanta fama tiene. Cuando tocas la mano de aquel que es idéntico a ti, algo mágico sucede. Comparten la apariencia, el calor, la sangre, a veces hasta el ADN. Tu espejo de agua, un amor imposible de superar. Algo así sentías por Uriel, tu gemelo.
Tus padres los tuvieron siendo jóvenes, pero la tragedia les tocó de lleno desde el principio: tu madre murió poco después del nacimiento de ambos. Al parecer la mezcla de su sangre, sumado a que eran dos seres, terminó por arrebatarle toda la vitalidad a aquella mujer. Siendo unos bebes, quedaron al cuidado de tu padre. El cual, al principio, los trataba con todo su amor. Uriel, poco a poco, al crecer, fue mostrándose más débil que tú. Eso angustiaba a tu padre, por lo que fue sumando su atención hacia él y tú fuiste relegado. ¿Eso te molestó? Para nada, también estabas preocupado por tu hermano ¿qué sucedió entonces?  
Tu familia era alguien de dinero, por parte de tu madre hasta tenías cierta nobleza, así que ese mundo lleno de lujos y comodidades no era de tu incumbencia. Incluso siendo el mayor de los gemelos, comenzaste a ser odiado por ese pensamiento. Tu padre te miraba diferente con ¿odio? Intentaba mostrarte como debías de pensar y nada más, pero tú ibas en contra de todo lo que él te dictaba, mientras tu hermano era forzado a ser el mejor. Él también debía de serlo, no sabía los motivos que su padre tendría detrás pero todo apuntaba que deseaba separarlos. Todo el mundo te señalaba, tenías la fama de rebelde desde muy joven y muchos te miraban con desdén, pero tu hermano no lo hacía. Uriel se convirtió en su vía de escape, al cual protegía como si no tuviese nada más, la única razón por la cual no te habías ido de casa. El único amor que sentías era aquel hacía tu hermano, pero tú nunca habías recibido lo mismo, aun cuando él te tratara bien y que su sonrisa fuese lo que te levantara cada mañana, él sólo miraba a tu padre, buscaba su aprobación.
De a poco comenzabas a cansarte. Ser libre a tu modo era lo que tanto deseabas y en tu hogar no lo lograrías nunca. Siendo tú mismo no funcionaba, así que comenzaste a ser como tu hermano, como tu padre deseaba que fueras. Entonces él se vio orgulloso de ti, te dio más privilegios, más salidas y premios en lugar de castigos. Ya no te miraba con odio. Pero al ver a tu gemelo lo sentías triste, no entendías muy bien que ocurría. Comenzaste a hacerte cargo de los negocios de tu padre, mostrarte como el verdadero heredero, dándole un descanso a tu hermano a quién más querías. Pero al hacer esto fuiste distanciándote de él sin darte cuenta.
Mientras tu hermano iba teniendo una vida más normal, comenzaste a realizar trabajos sucios para tu padre. La adrenalina te llamaba de alguna forma y, al volver a casa, llegabas con una sonrisa en tu rostro pro que se apagaba al sentirte ignorado por tu gemelo. Suponías que sólo era una etapa, hasta que un día no seguiste las indicaciones de tu padre, queriendo sorprender a tu hermano yéndolo a buscar a su universidad. La noticia te llegó como un balde de agua fría. Tu Uriel estaba junto a otra persona. Si hubieran estado hablando podrías haberte mentido creyendo que sólo eran amigos, pero no fue así. Los besos, las caricias, una expresión que nunca habías visto en él. Lo observaste todo, quedándote estático sin saber qué hacer. Si, incluso fuiste capaz de presentarte, provocando que aquel tipo se molestara con tu hermano por haberte ocultado. Ah, otro duro golpe más, habías sido negado por un momento. Pero tu amor hacia tu gemelo era más grande ¿no es así? Intentaste arreglar las cosas con ambos, aunque en el medio se agarraron a golpes y ese sujeto supo (más bien se dio cuenta) del amor más allá de lo fraternal que sentías hacia tu hermano.
No podías hacer nada, él se veía feliz con ese tipo a su lado. Tenías que hacer tu vida también ¿no es verdad? Intentabas desahogar tus penas en hombres y mujeres que vendían su cuerpo, en burdeles, en alcohol, cayendo de a poco la imagen que tu padre había tenido de ti. Pero eso no te importaba. Hasta que conociste a alguien, una persona que te sacó de ese mundo de vicios por un tiempo y creíste haberte enamorado de él. Que hermosa fue aquella época. Muchas  veces, tu pareja y tú se encontraban con tu hermano y aquel hombre y la situación era bastante agradable. Pero ¿Qué era esa tensión alrededor de los cuatro? Tu hermano otra vez.
Lo increpaste, le preguntaste por qué se estaba comportando como un niño mimado, más no te dio una respuesta. Te frustrabas y lo peor fue lo que pasó después: la persona que amabas desapareció. Nunca supiste el motivo, ni siquiera mencionó si iba algún lugar, peor al parecer fue por su propia voluntad. Volviste a deprimirte, más el rechazo de tu hermano y la mala visión de tu padre, decidiste vagar solo con el dinero que tenías encima.
Meses después, te encontrabas siendo parte de aquel mundo que disfrutabas. Necesitabas el dinero, pero luego se transformó en un nuevo vicio. Y allí volviste a encontrarte con tu gemelo, sorprendiéndote de verlo ahí. Extrañamente ya no veías  ese mismo brillo en los ojos de antes, pero la emoción le cegó. Fuiste comprado por él y en ese instante su “amor” fue consumado. No podías sentirte más feliz. Por fin él te miraba, sus caricias, sus labios, su cuerpo, todo era tuyo. Viviste unos años de ensueño. Una utopía. Michelle, las utopías son eso precisamente, un no lugar, no existe. Lo comprendiste con una fuerza abrumadora. Uriel te trataba cada vez más fríamente, te maltrataba, te humillaba, te trataba como un perro. Llegó un momento en que en verdad te consideraste una escoria. Tiempo después te dijo la verdad: sólo fuiste su juguete. Siempre te había odiado por obtener la atención de tu padre, luego por llevarte bien con su pareja y por haberte olvidado de él al conseguirte otra pareja. También te contó que él siempre había amado a su pareja, que si lo había dejado en su momento fue para vengarse de ti. Te abandonó esa noche. Los recuerdos de tu niñez desaparecieron, como si sólo hubiese sido una ilusión mal fabricada. Aun así ¿tú confiabas en él verdad? No creías en esas palabras crueles que te dedicaba, por eso le perseguiste. Volviste a casa pero ya no estaba ahí, tu padre ni siquiera le molestó que estuvieras ahí, se notaba deprimido por algo, pero él no te decía nada. Y de pronto sentiste el vacío.
Corriste, angustiado. Recordaste una habitación en un hotel, aquella que habían usado en una ocasión cuando fuiste lastimado hacía mucho tiempo atrás. Le perdonarías, aun si él no volviese, simplemente le amabas. Pero al encontrarte en la habitación sólo viste un recipiente vacío. Uriel sonreía aun estando sin vida. Lo abrazaste y gritaste, lloraste como nunca lo habías hecho. Caíste en la desesperación, jamás supiste la verdad de él. Y en tu sentimiento de posesión abriste su pecho y devoraste su corazón ¿Creías que de esa forma llenarías tu vacío? Mal, muy mal hecho. Ahora su corazón late junto al tuyo, pero te sigues sintiendo igual. Adquiriste varias de sus manías, como el deseo de ser reconocido. A partir de ese momento, volviendo de nuevo a ofrecer tu cuerpo, es difícil que alguien sepa realmente quien eres. Porque todo lo bueno que creías tener resultó ser una mentira, y no ibas a permitir que nadie más te lastimara. Absolutamente nadie.

Mal, mal, mal. No debiste haberte cruzado con él de nuevo. Tu corazón se siente tan pesado, tan adolorido. Pero, hay que verle el lado bueno, ya no te sientes tan solo ¿verdad? Sin embargo, incluso si sabes la verdad por sus labios no sabes muy bien que hacer. Quieres tocarlo pero no puedes hacerlo. Debes cuidarlo, levantarlo, él haría lo mismo por ti. Es el único ser que te importa y no quieres arruinarlo. Mn.. quien sabe cuanto tiempo más aguantes.



Artem:
Encandilamiento: Es la capacidad que permite a los usuarios enamorar a una persona ya sea físicamente o de cualquier otra manera, esta habilidad sólo funciona sí los usuarios poseen también la habilidad de empatía que permite controlar los sentimientos de los demás, de lo contrario, no dura más de minutos.
Habilidades: Enamorar a alguien que sea de su gusto, lo cual le permite ganar dinero más rápido. Es bastante útil al ser de tiempo limitado asi nadie se obsesiona de él. Generalmente lo logra con algunas caricias.
Debilidades: Precisamente es el tiempo, no dura mucho al no tener empatía, también depende si está lo suficientemente alimentado o podría no surtir efecto.


Tienes un tatuaje en tu labio, te lo hiciste luego de todo lo que ocurrió con tu gemelo.
Tus ojos verde son más intensos y brillan cuando estás sediento, tanto de sangre como de otras cosas.
Tus cabellos son oscuros pero tienen unos ligeros reflejos en las puntas de color beige.
Te tuerces el cabello con frecuencia, es una manía o un tic que aparece cuando estás aburrido o cuando no tienes nada que hacer, además de morderte el labio, justo del lado contrario donde se encuentra tu tatuaje.
No te agrada mucho cuando te toman el pelo o cuando creen conocerte a simple vista.
Tienes una fascinación por los corazones rotos, sientes esa necesidad de curarlos o comértelos-dependiendo de la otra persona, lo que pase primero-.
Eres muy bueno en la cocina.
Consideras valiosa a las personas que se arriesgan a conocerte aun sabiendo el dolor que le puedas llegar a causar.
En el fondo estás tan lastimado que puedes llegar a mostrarte débil y necesitado de amor. Pero no se lo mostrarías a nadie esta faceta. Debes mantener las formas ¿no es así?
Antes eras un sádico, pero luego de lo que pasó con tu gemelo, tus gustos fueron cambiando ¿eres un sadomasoquista entonces?
A veces te gusta coquetear con muchas personas, quién mejor pague es a quien más le darás amor.
Amas los frutos rojos, al igual que los dulces, el pastel de chocolate con frutillas y dulce de leche es tu favorito.



→ NOMBRE DEL FÍSICO: Zen
→ ORIGEN: Un:birthday ~Shinigami kareshi series~
→ CASTING / PRUEBA: --