Noir's ID

→ NOMBRE COMPLETO: Noir
→ EDAD: Aparenta unos 25 pero su edad real se desconoce
→ SEXO: Masculino
→ ORIENTACIÓN SEXUAL: Demisexual
→ RAZA: Mortiferis
→ GRUPO DE PERSONAJE:Chamäleon
→ NACIONALIDAD: Hell Itself
→ DISTRITO:Euphium


Si intentamos escarbar y buscar sobre aquello que lo define resultaría algo complicado dado que, es una mixtura de emociones y personalidades las cuales giran de manera aleatoria. Nunca lo han visto realmente serio, feliz, triste, eufórico, cuerdo o loco por la sencilla razón de que todo el tiempo abarca esas características al punto de que no llegan a saber si realmente posea alguna de ellas y las sienta como tal. Todo se resume a las circunstancias que pueda conllevar su trabajo; mas en lo personal sigue siendo una incógnita a la vista de todos aquellos que pueden considerarse sus “iguales” dentro de un pequeño círculo.

Primeramente, se podría decir que es algo lo cual puede comprender con facilidad las emociones de otros pues muchas veces se muestra compasivo, comprensivo, sutil e incluso muy amigable y fraternal. La empatía tampoco es algo que escape de su margen de virtudes pre-diseñadas, es más, se podría decir que esta es su principal característica a usar pues muchas veces a ganado la confianza de otros llevándolos a esa línea de confort personal. Si hay que resumir todo eso, diremos que es un bonachón amigable el cual viste de blanco a tiempo completo y siempre tiene la disposición de escucharte. Pero una vez más, es solo su trabajo y como todo trabajo, tiene un principio y un final. A diferencia de otros demonios, él no busca complacer necesidades humanas, muy por el contrario, su fuerte es el punto de quiebre personal, el empujar a la persona de esa delgada línea que divide la razón de la locura para desencadenar el instinto más básico y primitivo, por ende, cuando no se extiende algún tipo de circunstancias de manera natural ante él, se dará el tiempo de conocer una parte de sus víctimas para saber aprovecharlo al máximo en sus tretas, eso si es que logran llamar su atención y los ve como un juguete interesante pues siempre existen excepciones, claro está.

¿Pensaste que eso lo convertía en el típico chabacano buena onda? No, de hecho, pese a tomarse algunas libertades en cuanto al trato, también puede mostrarse muy elegante y refinado. Sus gestos, su postura y su forma de moverse pueden ser aquellas las cuales inviertan el más mínimo movimiento; pero siempre acompañadas de un máximo disfrute. Con eso se puede entender que es un ser extremadamente paciente e inquebrantable a las situaciones que, para otros, pueden resultar muy cansinas. Eso no significa que no sepa escoger con cuantos o con quien, es alguien que valora el tiempo mucho más de lo que se imaginan.

Nuevamente ¿Pensaste que eso lo convertía en el típico ser tranquilo, gentil, caballeroso y noble? Ja! Busca a tu príncipe en el basurero más cercano pues todo es apariencias tras apariencias. Noir puede estar parado de cabeza mientras come fideos chinos y se emociona por alguna programación de turno que envuelva peleas y sangre. Así como puede ser elegante, puede ser el despojo más decadente en cuanto a actitud y porte, todo a gusto del cliente o ingenuo de turno. Es solo su maldito pasatiempo al cual suele llamar trabajo.

Es un demonio el cual puede aparentar ser tan humano como los mismos humanos. Puede ser una persona perfecta o una persona con defectos y virtudes, un perfecto tonto para graficarlo de manera sencilla. Puede ser un padre, un hermano, un amigo o un amante, el sueño de alguna mujer o el sueño de algún hombre; aunque, claro, lo que ofrece realmente es veneno en pequeñas o grandes cantidades.

Dejando de lado su faceta como vendedor terrenal, está el demonio en sí, algo que es negro por dentro y negro por fuera, eso está más que claro. No confía ni en los suyos y a todos considera “basura”, desde el más al alto hasta el más pequeño e insignificante, por ende, nunca tiene la necesidad de mostrar una personalidad exacta dado que le gusta jugar con todos por igual. No se sabe si alberga necesidades que vayan más allá de lo que un demonio pueda contener o desear. Es orgulloso, vulgar, sádico, malévolo, iracundo, astuto, blasfemo y así un largo etc. que lo encasillaría en la fila de los suyos; pero es verdad, hasta él tiene sus propias características algo que siempre mantiene en ambigüedad.

Es de aquellos que se jacta de nunca haber dicho una sola mentira dado que, usualmente, solo dice verdades a medias. Es poseedor de un humor negro muy marcado y disfruta de ello a tiempo completo. Usualmente es de los que no mira a nadie a los ojos, incluso se llegó a estipular entre los suyos que pueda ser ciego, cosa que no es correcta. No es ciego y en contadas ocasiones a mirado a sus víctimas directamente a los ojos, lo que sucede es que tiene por tendencia mirar a un punto distante de manera fija sin prestar atención a su alrededor o mantener los ojos cerrados ya que, nuevamente, considera basura a todos y toma algo de trabajo llamar su atención o traerlo de regreso a tierra; sin embargo, es bien dicho que, una vez que posa su mirada sobre ti es porque, definitivamente, has captado su atención por algún medio y usualmente no suele suceder de la manera correcta por lo que, ese privilegio, conlleva a la muerte.

Tiene momentos en los cuales se pierde completamente en sí mismo, resaltando de tanto en tanto ese lado perturbado e impaciente; pero aun en esos momentos, nunca se sabe si goza de ambiciones de por medio, y de hecho, no las tiene. Eso es, quizás, lo confuso de su persona. Siendo un demonio, no ha demostrado tener ambiciones de por medio, muy por el contrario, en soledad se muestra neutro y aburrido como si se encontrara esperando a algo o alguien en particular pero la pregunta es ¿Qué o a quién?

Puede que, siendo un demonio orgulloso como tal, parezca difícil de tratar; pero resulta todo lo opuesto, aumentando la ambigüedad de su persona. Si bien es cierto que no mira a los ojos en señal de desprecio, irónicamente, es muy conversador y de trato fácil. Siempre tiene una charla en la lengua y puede mostrarse muy entretenido con las palabras que pueda recibir de su acompañante; aunque claro, la realidad es que, le importará un pepinillo de magnitudes cósmicas lo que el otro diga y posiblemente se olvide de toda la conversación que tuvo unos minutos después.

Pese a todo, se considera a sí mismo un demonio educado y encantador.




Si hablamos sobre la existencia de este demonio, previa a la entidad ahora llamada Noir, sería más coherente regresar al pasado y punto de origen, al menos hasta ese instante donde una oscura entidad pudo tomar conciencia de que era algo existente; mas no predominante. Una mancha oscura dentro de la misma oscuridad o como se podría definir mejor: “Un agujero que contenía aquel otro agujero que representaba su propia existencia.” ¿Suena complicado? Quizá, pero son solo detalles, no más.

El demonio de esta historia, siempre se mantuvo en una prisión desde tiempos inmemorables. Era su propia prisión bajo sus propias normas y sus propias condenas. No fue el primero, pero tampoco fue el último. Hubo aquellos que tenían la libertad de hacer y deshacer, tomar y dejar, crear y destruir. Nunca se antepuso sobre su conciencia la palabra “Iguales”, pero sin lugar a dudas, persistía cierta familiaridad, quizá la familiaridad de desear hacer lo mismo, quizá la familiaridad de ser tan libre como ellos, quizá la familiaridad de abandonar aquella prisión o quizá la familiaridad de ser él mismo pero… ¿Quién era él? En su caso, no bastaba solo ser una conciencia la cual pudiera aprender por medio de la curiosidad o por medio de la razón dado que su mismo ser rechazaba cualquier concepto que le diera indicios de vida. Simplemente era una entidad vacía, una entidad vacía la cual permanecería vacía durante todo el tiempo que este así lo quisiera. Entonces, bajo esa premisa nace otra pregunta: ¿Por qué?

El demonio era sencillamente eso, una parte de la nada. Una obra de arte jamás creada, un lienzo en blanco a la espera de las manos que pudieran darle vida; pero esas manos nunca llegarían, por ende, nunca deseó nada. Distancio su mente en las penumbras y prefirió descansar pues en aquel mundo no se permitía la autocompasión o una lágrima a la nada, solo la indiferencia y la negación. De eso se trataba su prisión, pero aun en esa celda personal, ganó una nueva habilidad, aquella la cual le permitía escuchar.

Tenuemente lograba escuchar las sonrisas, los gritos y las voces distantes de aquellos que empezaron a aparecer antes que él, aquellos que irrumpían su descanso y los cuales poco a poco le dieron un despertar, pero no fue un despertar amargo; sino que, por el contrario, le brindaban una ligera satisfacción, la satisfacción de saber que existía, de emplear la razón y discernir las realidades, de comprender que aún no pertenecía completamente a la nada. Eso era suficiente para darle un poco de paz mientras las manecillas del tiempo, continuaban su marcha sin esperar.

Ocurrió la vez en que no pudo escuchar más nada. No habían más voces, no habían chirridos, no había absolutamente nada ¿El tiempo finalmente se había confabulado con el vacío para consumirlo y reducirlo a ser parte de esta nada? Ya había sido suficiente de quedar estático en aquel punto, y fue que disfruto por primera vez de algo lo cual llamarían “miedo” y entre ese miedo, el pavor de no existir, el pavor de quedar en el olvido, y el pavor de ser finalmente lo que aquella prisión pretendía hacer con él que, sus labios, se curvaron para mostrar una extendida y exagerada sonrisa. Podía oírlo, podía oír claramente los murmullos regresar, pero estos eran distintos, eran voces que divagan en su propia nada, voces que circundaban a su alrededor, voces que le hablaban, voces que lo incitaban, voces que le advertían… voces que lo invitaban. Finalmente sus labios se entreabrieron y ganó la facultad del habla.

Ahora las conversaciones eran extensas, conversaciones las cuales, por sorprendentes que sonara, llevaban el hambre por el conocimiento. Entre cada palabra que articulaba se encontraba lo absurdo, pero a su vez era la sabiduría la que hacía eco. Las ideas se apilaban en su mente, el deseo por querer aún más, por desear alcanzar cada vez más, por dejar de ser parte de la nada y ser parte de un todo. Fue allí que una de las voces le susurró al oído y de aquel pensamiento, su oscura e indefinida figura ganó forma física, ganó extremidades las cuales lo ayudaron a desgarrar su prisión, a romper las paredes que lo apresaban y andar como un animal, una grotesca bestia sombría en el mismo mundo en el cual caminaban sus iguales. Ya no permanecería estático en aquella prisión.

Finalmente aquella figura comenzó a divagar en un mundo corroído por lamentos y la algarabía, los rugidos de bestias, algo que ya era como una canción de cuna para sus oídos y el aroma a todo aquello que pudiera estar podrido. No necesitó que le explicaran la razón o los motivos. Sabía mejor que nadie como funcionaba aquel mundo, era instintivo, pero aun así, deseaba tener el deleite, gozar en primera fila de ello, su ambición se acrecentó y por tal razón, al abrir sus parpados, dos gemas doradas relucieron brillantes y penetrantes. Pudo apreciar el mundo en el cual se encontraba, maravillado por todo aquello lo cual consideraba de su entera propiedad. La decadencia infinita y un largo sendero trazado con los cuerpos apilados de aquellos que fracasaban en su búsqueda de ese “algo” y que ahora intentaba por si mismo reclamar. Su risa fue fuerte y constante, propia de algo carente de cordura, pero ¿Quién podía culparlo? Se sentía con vida. Respiró profundamente el miasma, completando sus sentidos. No era más una obra inexistente, era la más fina creación, creación realizada por sus propias manos bajo sus propios fundamentos: El poder y las probabilidades. El demonio estaba listo para ocupar su lugar correspondiente en el infierno.

Para el tiempo en que la humanidad comenzó a caminar en la tierra, el demonio había devorado a cuantas bestias similares se habían cruzado en su camino. Era como un animal errante el cual aprendía por instinto y ganaba poder en base a experiencia, uno el cual pavimentaba su legado con brutalidad y excesos, excesos propios del mundo el cual habitaba; pero quizás ese era el problema, el mundo el cual habitaba empezaba a resultar pequeño y agobiante. Eventualmente el cansancio y el aburrimiento llegarían, y ese sería el principio de una nueva etapa, aquella en la cual observaba en silencio la evolución de la humanidad con mirada mórbida.

Aquellas criaturas frágiles solían resultar tan depravadas como las mismas bestias que habitaban el infierno; pero a su vez resultaban tan insignificantes que si lo meditaba, era absurdo devorarlos, entonces… ¿Qué podía ganar de ellos? La duda quedó presente en su mente al igual que aquellas formas, y su cuerpo animal el cual había sustentando su existencia, tomó una figura similar, una forma humanoide con manos y piernas.

Su atracción hacia la especie humana fue tal que logró identificar ciertos patrones, aquellos los cuales empezaban a convertirse en privilegios de algunos pocos, esos los cuales se alimentaban de la negatividad que habitaba el corazón humano, esos mismos sentimientos que eran arrebatados y convertidos en alimento de otros. De ser así ¿Por qué la humanidad no lo alimentaba de la misma forma? ¿Qué era aquello que esas criaturas compartían con su ser? No tardó en encontrarlo, eso lo cual le causaba placer y euforia. Los humanos se lastimaban o se mataban unos a otros, presas de los sentimientos que los llevaban a lo más básico: La ira. Eso se convirtió en su disfrute y juego. Se convirtió en el amo y señor de aquella emoción, era así como los humanos lo adoraban, eran así como los humanos recurrían a su abrazo, era así como una parte de ellos era de su absoluta pertenencia y como tal, eso se convirtió en su adicción personal.

Cuando todo parecía tener forma en su mundo, cuando todo parecía encajar a la perfección, llegaron aquellos que también deseaban reclamar lo suyo, aquellos que no venían del mismo mundo pútrido, aquellos a los cuales la humanidad, con el tiempo, llamó “Ángeles”.

La disputa comenzó, y una vez más, cual bestia territorial, el demonio comenzaría a batallar por aquello lo cual consideraba suyo por derecho. Al ser único como pocos, fuerte y dominante, ganaría la mirada de aquel que gobierna el averno, convirtiéndose en uno de sus favoritos, y por ende, otorgándole una parte de sus dominios, cosa que le resultó irónica al demonio pues, desde un principio todo lo sentía como suyo sin necesidad de que alguien tuviera que señalárselo, pero no era tonto, la experiencia ya lo había bañado con sabiduría, y como tal, continuó a sus anchas, destrozando y ganando influencias sin molestarse en pequeños detalles.

Entre tantas batallas conocería a aquellas criaturas las cuales eran llamadas arcángeles y con los cuales se hizo un nombre y fama. Supo salir victorioso de diversos encuentros, pero solo uno logró quedar en sus memorias, quizás por la interacción o por el hecho de tomarse el tiempo en escuchar lo que el otro tenía que decir antes de encontrar la muerte, o quizás simplemente fue el hecho de que, a este arcángel en particular le robaría su imagen, convirtiendo su piel en la suya propia al carecer de una. Lo que vino después era solo una comedia a sus ojos pues le resultaba hilarante la reacción de las criaturas “celestiales” ante la apariencia de un demonio vestido con la piel de uno de los suyos. Era el más claro ejemplo de un lobo vestido con piel de oveja, oveja a la cual, eventualmente, llamarían “Noir”.

El tiempo no se detuvo y con este, Noir se volvió arrogante y egocéntrico como cualquier otro. Poco a poco dejó de ver el rostro de sus enemigos o aliados, para él todos eran víctimas las cuales solo se diferenciaban por las circunstancias. Su función era clara y como tal, se mantuvo gobernando en los corazones humanos bajo ese sentimiento que reclamaba como suyo y a lo cual otros llamaban un “pecado”. Se podría decir que la bestia se civilizó y encontró descanso, o eso es lo que quieren creer. Se mantuvo en letargo y poco se supo de él, se podría decir que desapareció de la noche a la mañana; aunque, claro, la humanidad siempre dejaba en claro que él permanecía entre ellos, rondando y desatando esa emoción propia de sus disfrutes personales.

Llegamos a ese momento de la historia que quedaría marcado en los registros de la humanidad, aquel el cual llamarían “La Gran Guerra”. Sería en este punto donde la silueta de Noir volvería a levantarse una vez más en el infierno que los mismos humanos habían creado; sin embargo, era claro que sus intereses iban más allá de lo que en un principio pudiera haber tomado sin reclamar. Se encontró allí como un invitado de honor, se sumó a las filas del infierno y apoyó con una sonrisa de satisfacción. Se dejó encasillar en un rango y hasta ocupó un puesto en el cual se le asignó una misión. No hubo reclamos por su parte, muy por el contrario, mostró serenidad y conformismo comenzando a actuar como los ojos de los gobernantes hasta el día de hoy.

O eso es lo que la mayoría piensa.


• Invocación: Es la capacidad que posee el usuario de poder invocar a seres u objetos para pedir ayuda, esto puede variar desde invocar implementos sencillos a poderosos espíritus familiares.

Invocaciones (Familiares) y Habilidades

Limitaciones de invocación:
-Solo puede invocar dos familiares a la vez.

The Despair:

Demonio familiar el cual resalta por su dura piel, capacidad de regeneración y características defensivas. En combate, la criatura vierte su propio vómito sobre el invocador para formar una capa protectora translucida, la cual reducirá a la mitad el impacto de los ataques físicos o elementales. La capa puede resistir un total de seis impactos antes de perder sus propiedades mágicas. No ocurre lo mismo con el elemento luz o sacro, en ese caso solo podrá resistir tres impactos como mucho.

Debilidad: Debido a que su función es defensiva, la invocación se desplaza de manera lenta y carece completamente de algún ataque ofensivo, tampoco posee un escudo mágico propio lo que hace que dependa mucho de la característica de rápida regeneración, algo que lo hace casi invulnerable a los ataques físicos; pero no sucede lo mismo con los ataques mágicos. 5 impactos elementales pueden anular a la invocación.



The Sorrow:

Familiar de tipo espectro, poseedora de la esquila de los lamentos. En combate cumple la función de sanadora mental. Al agitar la esquila, esta produce un sonido capaz de eliminar alguna ilusión o realidad distorsionada en contra del invocador. Su tétrico alarido también es un mecanismo de ataque ya que puede aturdir momentáneamente a los atacantes debido al nivel de amplitud que posee. No afecta a su invocador debido a que, el sonido, solo se reproduce en la mente de sus víctimas, la invocación en si no posee cuerdas vocales o voz.

Debilidad: Es un familiar de tipo espectro por lo que no es muy resistente a cualquier ataque elemental. Solo toma un ataque para anular su invocación.



The Hatred:

Familiar de tipo cazador y segunda invocación más fuerte de Noir. Este demonio carece de poderes mágicos y depende únicamente de su impresionante velocidad. Si bien es cierto que no goza de la fuerza y la resistencia física que posee The Vengeance, sus rápidos y silenciosos ataques y los finos cortes que produce con sus garras y cuchillas, puede resultar un oponente mortífero en espacios o lugares en los cuales pueda emplear el sigilo.

Debilidad: Es vulnerable a los sonidos o aromas fuertes. Debido a que es ciego depende mucho de esos dos sentidos. Requiere 4 impactos directos para anular a la invocación.



The Vengeance:

Familiar de tipo guerrero y principal invocación de Noir. Goza de una fuerza, resistencia y agilidad destacable. Esta invocación en particular es un experto con la espada y puede entrar en sincronía con los atributos físicos de Noir, otorgándoles un porcentaje adicional de fuerza de un 10% el cual irá aumentando en relación al tiempo que la invocación permanezca activa (cada tres respuestas para ser más preciso).

Debilidad: Como es de esperarse, es vulnerable a los ataques de agua y hielo; sin embargo tiene mayor tolerancia a otros elementos.

Por lo mismo que tiene mayor afinidad con el invocador, la eliminación de esta invocación puede causar un gran desgaste mental de manera abrupta en Noir si ambos llevan más de un 70% de sincronía, ese desgaste se puede reflejar de manera física como una parálisis momentánea. Requiere de 8 impactos directos para anular a la invocación.

Esta invocación es la única que no puede ser invocada cuando otra está activa. Es la única que actúa netamente en solitario como condición.

• Amplificación de poderes: Es la capacidad que posee el usuario para mejorar o debilitar los poderes de los demás.

Habilidades

• Harlequin
  Duplica los poderes del objetivo.
  
  Debilidad: Solo puede potenciar a un solo objetivo. De ser una invocación, a causa del acrecentamiento forzado de poder, esta se cancelará al segundo turno, cual sea la resistencia que posea. De no ser una invocación, Noir perderá un 20% de su poder ya que la energía no vuelve a él como sucede con la muerte de una invocación.
  
  
• Trick Or Treat
  Triplica el poder del objetivo.
  
  Debilidad: Necesita estar en contacto físico con el objetivo durante todo el proceso. No puede emplear este poder en invocaciones. Una vez usado este poder, Noir quedará completamente paralizado y requerirá de un tiempo para recuperarse (4 turnos para ser preciso)
  

Gustos

-Todo aquello relacionado con el odio.
-Beber y fumar.
-Las noches de luna llena.
-El invierno y los días de lluvia.


disgustos

-Todas las razas.
-Los días soleados.
-Los niños.
-Las limitaciones que puedan imponerle otros que no sea el mismo.


datos curiosos

-Fuma todo el tiempo.
-Suele jugar con un mazo de tarot a manera de relajo.
-La mayor parte del tiempo está acompañado de “The Sorrow” y la considera su amante preferida.
-Detesta andar vestido por lo que, en cualquier lugar que considere hogar preferirá andar desnudo.
-Toca todo tipo de instrumentos musicales sin necesidad de envidiarle técnica a algún profesional.
-Si está en una cocina la hace añicos en menos de 20 seg.
-Es pésimo cocinando y se le quema hasta el agua.

extra

-Posee una katana la cual usa como arma de ataque y defensa. El arma en si no posee ningún poder, pero su resistencia al impacto contra otras armas es notable gracias a los poderes sobrenaturales de Noir.
-Es experto en el combate cuerpo a cuerpo, pero no gusta de mancharse las manos, por esa razón siempre está estático dejando que otros hagan el trabajo.
-Los familiares que posee fueron antiguos rivales a los cuales condenó a servirle fielmente.
-Existe un rumor de que Noir realmente está muerto y el que ocupa su lugar es un usurpador; pero es algo que no ha podido ser confirmado.


→ NOMBRE DEL FÍSICO: Leon
→ ORIGEN: Reine des fleurs
→ CASTING / PRUEBA: Nothing stranger than today.