K I L L E R ☣

NOMBRE COMPLETO: Aldhehrt Annelise Lumaiwald.
EDAD: 22 años.
SEXO: Masculino.
ORIENTACIÓN SEXUAL: Homosexual.
RAZA: Híbrido [Shifter: Boa Constrictor | Vampiro]
GRUPO DE PERSONAJE: Hitmen.
NACIONALIDAD: Alemana.
DISTRITO: Euphium.


Aldhehrt tiene una increíble calma que es capaz de observarse a través de sus suaves acciones que realiza todos los días, es tranquilo, no es callado de por sí, es capaz de hablar si eres capaz —que es la palabra exacta— de entretenerlo con temas que a él le gustan. Es excepcionalmente atento, perspicaz, agradable pero sobre todo malicioso a la hora de observar su entorno, incluyendo las situaciones que se desarrollan a su alrededor. No es capaz de dejar pasar cualquier asunto sin relevancia, porque entre más pequeño sea, más importante se va a presentar de un momento a otro, detalla hasta las acciones más mínimas, no pierde atención a las acciones más pequeñas, sudor, movimientos, temblores, incluso logra captar con perfección a quienes en clase están haciendo trampa o están planeando algo. Capaz de cerrar sus ojos y escuchar muchas cosas a su alrededor, juntando conversaciones para llegar a una conclusión o simplemente ignorar a quienes están a su alrededor. Presta estricta atención a todos los demás, para entender los motivos que envuelven a muchos, le encanta el misterio e incluso, compila en su cabeza una cantidad de información que pertenece a las demás personas que se han reunido a su alrededor para referenciarse con respecto a acciones que no van incluidas en su personalidad.

Se preocupa prácticamente nulo con cosas que ponen nervioso a los demás, usualmente se ve discutiendo abiertamente con personas que pueden ser inclusivamente delincuentes o mostrar en sus entrenamientos ni una pizca de terror al tener un cuchillo real entre sus manos en busca de atacar a quien este delante de él. En sus ojos se refleja que esconde mucho más de lo que muchos podrían desear, no tiene futuro alguno, al menos, piensa desde su punto de vista que no importa lo que pueda venir, no va a tener nada más que el asesinato y algo que le guste tanto como la cocina. No tiene emociones que ocultar, mucho menos le interesa ser el centro de atención hacía los demás. A él, la falta de metas e inclusive preocuparse por asuntos tan tontos lo tienen sin cuidado.

Aldhehrt en ocasiones es capaz de verse con una sonrisa juguetona que parece indiferente al sufrimiento de los demás, es obvio, que elimina a aquellos que son sus trabajos, pero también, le divierte saber que están aquellos que se interponen en sus planes impidiéndole continuar, no es fácilmente intimidarlo, sobre todo, cuando el tema de la muerte se trata, es capaz de sonreír, mostrar aquella sonrisa entre sus labios que puede helara a cualquiera. Generalmente hablando, es directo, sin andarse con parloteos ridículos. Prácticamente le preocupa nulo los demás, simplemente son juguetes que están en su juego, nada más, nada menos. Pero están las excepciones, y sólo existe alguien en el mundo a quien respeta lo suficiente para alejarlo de esta temática. Tiene cierto apego a esa persona, capaz de protegerla inclusive, de él mismo. Es indiferente en ocasiones, pero también, muestra poco interés en cosas de no vital importancia.

Parece el típico chico débil, quien es usualmente abusado por los demás, pero es inteligente, capaz de salir de las peleas con mucha más habilidad que los demás. Es pequeño, pero también peligroso. No se deja influenciar por nadie, y, aunque su padre crea que es un muñeco de trapo, tiene mucha más personalidad que él mismo. Hace las cosas de frente sin consideración alguna, demostrándose a ese hombre que no se controla, ni se intenta controlar lo que no puede. Es capaz de utilizar a los demás, manipularlos para su propio bien, de forma sutil, amigable, utilizando su sonrisa falsa y sus pequeñas acciones. No cae en la persuasión con facilidad, tampoco está interesado en caer manipulado, sin embargo, mantiene cierta distancia de las personas que puedan penetrar fácilmente su corazón. No se enoja, pero cuando lo hace, suele tener un humor de los infiernos, prefiere estar solo en estas ocasiones o al menos, quedarse en casa.

Es posesivo, con objetos, animales o últimas personas que ha considerado como suyas. Serio en sus acciones, así, como no deja de relucir sus sentimientos sin temor a que se burlen de estos, sin embargo, son tan pocos los que tiene, que muchos lo consideran alguien inexpresivo. No es complejo, de hecho, es bastante sencillo de ver, no oculta absolutamente nada e incluso, posee un toque que es capaz de atraer a muchas personas, sin embargo, muchos que caen en esta atracción…

Terminan muertos. ¿Cuánto quieres esperar para morir?


Aldhehrt nació en un laboratorio, no como experimento —al menos, al principio fue así—, nació como el hijo de una de las científicas más reconocidas de ese laboratorio. Una vampiresa, quien entre sus noches de saciar con cualquier hombre que se hubiese revolcado, un vampiro de alta cuna le había seducido lo suficiente para dejarla embarazada: el fruto de su futuro. Su madre, bien aceptó el embarazo, pero nunca deseo que fuese niño, ella quería una niña, una hermosa señorita que pudiera seguir sus pasos, alejarse de los malos pasos de ese vampiro que desapareció años después, pero la vida le jugo en contra, como con todos, y tuvo un niño. Annelise fue el nombre con el que su madre le llamó toda su infancia, sabía que Aldhehrt era su nombre, los demás científicos se dirijan a él con ese nombre o simplemente no lo hacían, su madre era una mujer estricta, el cabello largo, ropa de niña, vestidos, maquillaje, todo lo que colocaba encima de su mesa debía de usarse a la perfección. Debía de ser inteligente, fuerte, delicado, astuto. Sin embargo, nunca le interesó absolutamente nada de lo que le rodeaba. Aprendió a maquillarse, a vestirse de niñas cuando salía, a tener el cabello largo, a hacerse coletas, a salir con vestido, jugar con otras niñas, cambiar el tonó de su voz a uno femenino. Aldhehrt aprendió a ser Annelise, y esta, aprendió que Aldhehrt en ocasiones solía salir, porque por más que lo intentara, seguía siendo niño y se oponía rotundamente a la cirugía que su madre había pensado en hacerle.

A sus diez años, su madre le involucró en un proyecto, era la asimilación de un nuevo ADN, ningún sujeto de prueba había resistido, pero ella estaba segura de que su hija lo lograría. Annelise fue puesta a prueba a pesar de que todos los de aquel lugar se oponían, la sangre del shiffter había sido inyectada en su cuerpo y, aunque duro muchos meses haber probado con excelencia que estaba completamente curado, que todo había funcionado, las secuelas comenzaron, las muertes en el laboratorio comenzaron a crecer, muchos se asustaban en las noches al escuchar el silbido de una serpiente, sentían que algo se les enrollaba en sus piernas, poco a poco, perdiendo la vida. Escuchaban los fuertes gritos aterrados, los silenciosos sonidos deslizándose por el suelo e incluso, una noche, se vieron rodeados de un montón de serpientes que estaban dispuestas a atacarlos a todos, y en el medio, no era Annelise, era Aldhehrt, quien estaba de lo más tranquilo retocando su cabello, volviéndolo corto, pero no tan corto como un niño, corto hasta sus hombros, acomodándolo en una baja coleta que le permitía ver con más claridad, vestido de niño, con un pantalón largo y arreglándose las uñas como algunas veces Annelise lo hacía. Escuchaba como suplicaban por ellos, como su madre lloraba preguntándole ¿qué es lo que había hecho mal para que él intentara matarla? ¡La había educado con toda la precisión del mundo! —. Soy niño, ¿lo olvidas? No puedo ser tu nena preferida, no podemos ir a comprar ropas juntas porque tenemos gustos diferentes. ¿No lo entiendes? Nunca fui tu niña, fingí que lo era e incluso, ahora estoy fingiendo sentir algo por la muerte de ustedes… No es como si me interesara… mátenlos. Escuchó el grito de auxilio de todos los científicos, él se hacía paso entre un gran mar de serpientes que le dejaba marcharse, sentía como tenía picazón en la piel, como la piel de serpiente que había comenzado a aparecer se hacía cada vez más mascada, olvido lo que era el sentimiento de querer, olvidó, que tenía una madre.

Pero lo encontró, a la entrada un hombre alto estaba esperándole, vestía una bata de laboratorio, con una sonrisa entre sus labios. Lo vio, a través de los ojos contrarios. Era igual a él, un vampiro, pero también, tenía algo diferente que no había podido encontrar en su madre, esa mujer que había perdido el camino de la vida: ambición. Su padre tomó su tutela, arrancándosela de las manos de aquella mujer, no estaba interesado en convertirlo en niña, tampoco le interesaba si seguía siendo niño. Lo único que ese hombre quería era convertirlo en su marioneta, en su juguete, le enseñaría a controlar aquello que no podía controlar, lo volvería más fuerte, lo haría, sin lugar a dudas, su experimento personal. Aldhehrt no tenía nada que perder, y, si se iba con ese hombre podría hacer lo que deseara porque así se había planteado el contrato silencioso entre ambos. Se fue, a Euphium Virietum.

Actualmente, Aldhehrt es uno de los asesinos más despiadados que trabajan desde la sombra del parlamento, aunque solamente sea un niño, trabaja directamente para los trabajos más sucios que son otorgados por estos grandes hombres. Su padre es un científico reconocido de la misma ciudad quien todos los días le hace revisiones en su cuerpo para ver los progresos del estabiliza miento del ADN del shiffter que fue incrustado en su cuerpo. Se siente orgulloso de lo poderoso que es su hijo, tanto así, que le permitió acceder a una escuela privada de la propia ciudad donde será capaz de completar como toda persona normal sus estudios. La vida de su hijo no le interesa más allá de lo que es un experimento y él no está interesado en que su padre sepa más allá de él de lo que actualmente sabe. Algún día su relación se va a romper, pero eso realmente le tiene sin cuidado, la única relación que realmente valora es la de: Lucien Heibergh, su mejor amigo.


ARTEM:
Mimetismo animal: Es la capacidad que posee una raza en específico para asumir la capacidad y la forma de ciertos animales, existen mimetismos animales que adquieren el físico de animales en su forma humana.

HABILIDADES | DEBILIDADES

• Tiene la capacidad de convertirse en un boa constrictor. Lo que le permite tener un fuerte veneno que utiliza incluso cuando está en su forma humana a través de los colmillos de su parte vampira. La debilidad es la capacidad que tiene para trasmitir aquel veneno, en ocasiones, él, al ser portador del mismo antibiótico no puede utilizarlo tan seguido; porque probablemente el mismo veneno se convierta en un salvador para su víctima.


—Ha mantenido su cabello más o menos largo para cuando la misión requiere de seducir a tu víctima, todavía es capaz de vestirse de niña para cumplirla, por esta razón, suelta las coletas que usualmente porta para colocarse una falda.
—Es un asesino a sueldo que trabaja para el parlamento.
—Es estudiante en una escuela privada que se enfrasca en enseñar cursos técnicos. Actualmente está tomando cocina.
—Estudia lenguas extranjeras en una academia en la noche, usualmente es cuando trabaja, sin embargo, lo hace luego de haber terminado las clases.
—Es poliglota, habla: alemán, inglés, francés, italiano, portugués y actualmente está aprendiendo: japonés, coreano y mandarín.
—Sabe técnicas de autodefensa, sin embargo, su asesinato es el silencioso, por lo que se enfrasca en aprender técnicas de sigilo.
—Tuvo un maestro de la milicia quien le enseñó todo lo que sabe, fue el anterior general de las fuerzas armadas, fue él quien lo asesino.
—Lo único que habla con su padre son sobre los trabajos que ha realizado y lo que siente.
—Ha avanzado tanto su tratamiento que las escamas que aparecían en su cuerpo han ido desapareciendo, sin embargo, sigue utilizando ropa manga larga para que estas no se vean.
—Es capaz de hablar y controlar a las serpientes, también, de transformarse en una.
—Usualmente sus colmillos funcionan de dos formas, de succionar sangre u escupir veneno a través de estos.
—Ha estudiado sobre todos los venenos tóxicos de las serpientes, usualmente su asesinato trata de hacer beber a las victimas las toxinas, o ir directamente por su cabeza, le gusta más lo segundo, pero lo primero lo hace cuando está realmente ocupado.
—Le da igual los demás asesinos.
—Tiene conocimientos sobre química, física e incluso astrofísica entre otros temas de la química como su padre.
—Aprendió sobre actividades científicas por su madre, pero también, admite que su padre tiene más conocimientos que su actual madre muerta.
—Nunca regresó a Alemania.
—Su confianza es nula, y bajar la guardia delante de las personas también es algo que usualmente lo tiene atento, sin embargo, logra hacerlo cuando está con su mejor amigo. Admite que tiene un extraño aura que lo tranquiliza.
—Ama las películas de superhéroes.
—No fuma, no bebé. No porque no le guste, sino, porque el tratamiento que está efectuándole su padre le prohíbe probar sustancias ilícitas.
—Ama cantar en el karaoke aunque sea realmente malo.
—En casa, tiene una habitación completamente femenina, diferente a la suya, dónde usualmente guarda vestidos entre otras cosas.
—Es amante de los grupos de k-pop y j-pop. También, de la cultura japonesa, tiene varias mangas que son realmente antiguos.
—Le gusta cocinar, usualmente es él quien se encarga de todo lo que ocurre en la casa.
—Vive en un apartamento con su padre, pero él casi nunca está allí.
—Todas las noches, luego de las doce tiene que llegar al laboratorio para revisión constante.
—Es virgen.
—Le gusta Lucien, sin embargo, no encuentra la forma de expresar sus sentimientos con palabras.
—Intenta mantenerse alejado de quienes puedan meterlo en problemas, a pesar de que su amigo es quien más lo mete en problemas.
—La lluvia, su sonido e incluso humedecerse en ella le calma y olvida todo lo que ha vivido.
—Su estatura es de: 159 centímetros. Es el más pequeño de toda su clase.
—Cumple el 20 de julio.
—Su número favorito es el 11.


NOMBRE DEL FÍSICO: Nagisa Shiota.
ORIGEN: Assassination Classroom.